El régimen de Venezuela contrató los servicios de piratas cibernéticos para espiar a la oposición, a periodistas y a la sociedad civil, y tiene las herramientas para interceptar las comunicaciones emprendidas a través de
celulares y de computadoras, incluyendo correos electrónicos, mensajes
de texto y conversaciones de voz realizadas a través de Skype
, informó el Nuevo Herald.
En un artículo publicado el jueves, el Herald
explica que como esas herramientas consisten en el uso de malware que
permite monitorear directamente el uso de las computadoras y teléfonos
celulares en vez de simplemente interceptar las señales electrónicas que
salen de los dispositivos, la encriptación utilizada por algunos servicios de mensajería dejan de ser una garantía de privacidad para los equipos intervenidos.
Las últimas versiones de estos equipos fueron adquiridos hace cerca de dos años por el régimen de Nicolás Maduro
y desde entonces han sido utilizados para espiar a "objetivos
seleccionados", dijeron a El Nuevo Herald fuentes cercanas al aparato de
seguridad de Venezuela,
"Esos equipos están instalados", confirmó una de las fuentes que habló bajo condición de anonimato. "Fueron adquiridos hace más de año y medio".
(Shutterstock)
El régimen bolivariano viene utilizando desde hace un tiempo a expertos
en materia de informática para tratar de interceptar los correos
electrónicos y las cuentas de Twitter de periodistas y de dirigentes de
la oposición.
Pero esas operaciones venían siendo realizadas a través de prácticas rudimentarias.

Los nuevos sistemas otorgan métodos muchos más ágiles y sistematizados
de intercepción y permiten monitorear las comunicaciones de miles de
personas a la vez, haciendo uso servicios que están siendo ofrecidos a
gobiernos de otros países como herramientas para combatir el terrorismo.
"Todo
esto tiene el carácter de las armas, que pueden ser utilizada para
bien, para brindar seguridad y proteger a la gente, pero que también
pueden ser utilizada para mal"
, dijo en Miami el experto en informática Vicente Pimienta.
Estando en manos de gobiernos autoritarios, como el venezolano,
estas armas pueden ser usadas para espiar a la sociedad civil, y es
fácil deducir que las herramientas de espionaje están siendo usadas para
reprimir toda forma de disidencia
, agregó Pimienta.
Un reciente estudio elaborado por Citizen Lab, un centro de investigación de la Universidad de Toronto, esboza el amplio uso de operaciones de espionaje cibernético contra periodistas y disidentes en países latinoamericanos vinculados con el bolivarianismo, incluyendo Ecuador, Argentina, Brasil y Venezuela.

Citizen Lab, entidad abocada a investigar el uso de tecnología por
parte de gobiernos para espiar a sus ciudadanos, también anunció haber detectado en Venezuela el uso de la herramienta de ciberpiratería conocida como FinFisher.
Comunicaciones vulnerables
El software, que
ha sido utilizado en varios países autoritarios para espiar las
actividades de la oposición, normalmente es instalado en las
computadoras, tabletas, teléfonos celulares y otros dispositivos
sin que sus dueños se den cuenta. En ocasiones esto sucede haciendo uso de las actualizaciones de programas.
Nicolás Maduro (AP)
Una vez instalado, el programa puede ser utilizado para monitorear el uso que el "objetivo" hace de sus dispositivos,
pero está especialmente diseñado para capturar las comunicaciones,
incluyendo las conversaciones que podrían hacerse a través de Skype,
sistema usado ampliamente en Venezuela bajo la creencia de que no puede
ser intervenido.
Además de Venezuela, el FinFisher también es utilizado por México y Paraguay en América Latina, según la investigación de Citizen Lab. La licencia para operar el programa cuesta cientos de miles de dólares.
Otros de los servicios de piratería cibernética que podría estar siendo utilizado en Venezuela es el de RCS de la firma italiana Hacking Team.
El malware, de características similares a las de FinFisher, fue
ofrecido a distintos organismos de seguridad de Venezuela, incluyendo
al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN)
, la
Dirección General de Contrainteligencia Militar, y a la Guardia
Nacional, según reveló una serie de documentos internos de Hacking Team
filtrados por WikiLeaks.

Los documentos y los correos electrónicos filtrados muestran que las
autoridades venezolanas expresaron interés en adquirir RCS y que los representantes de Hacking Team organizaron reuniones para hacer demostraciones.
Jauría de ratas
Lo que sí se sabe sobre las actividades de espionaje es que la agrupación conocida como PackRat -jauría de ratas- tiene entre sus blancos dirigentes de la oposición venezolana.
La agrupación, cuya existencia también fue reportada por Citizen Lab, lleva años realizando operaciones de espionaje cibernético desde los países del ALBA, con especial énfasis en espiar las actividades de dirigentes de la oposición, periodistas y activistas.
La MUD busca que el gobierno de Nicolás Maduro deje el poder
"Estos son instrumentos de piratería cibernética que son de fácil acceso, pero a los cuales luego se les ha colocado otra capa para esconder las actividades del PackRat, lo cual hace que al final sea una herramienta mucho más poderosa", explicó.
PackRat ha estado operando en los países del ALBA desde hace ya bastante tiempo. Citizen Lab los detectó por primera vez en el 2008.

"En términos de los blancos, y de los materiales que fueron utilizados como parte de la decepción, es
obvio que esto estaba dirigido contra personas involucradas en la
política, y el contenido utilizado para la decepción también era muy
político
, sugiriendo que estos eran objetivos políticos en vez de objetivos de seguridad", agregó Railton.